Como su nombre lo indica, fan (ventilador) y coil
(serpentín), el fan-coil no es más que un gabinete con un serpentín por el cual
circula el agua fría o caliente proveniente de una unidad de enfriamiento o una
caldera y ventiladores centrífugos que provocan la circulación del aire del
local, constituyendo las unidades terminales en los mismos.
Cada unidad terminal fan-coil está constituida por un
gabinete que contiene la toma de aire exterior y de retorno, filtro, serpentín
y ventiladores centrífugos de doble entrada montados sobre un eje común a un
motor eléctrico, que distribuye el aire al ambiente por medio de una reja
frontal u horizontal.
Cuenta con un pleno de mezcla en la parte inferior para
regular las proporciones de aire de retorno del local y aire nuevo de
ventilación y de esa manera, el aire circula y atraviesa sobre el serpentín o
batería que puede ser de 2 a 4 hileras por la cual fluye el agua fría o
caliente.
Los sistemas que emplean este tipo de equipos son de
instalación muy simple y tienen la posibilidad de regulación manual o
automática de temperatura en cada ambiente, ajustando la capacidad del
ventilador, los que cuentan con tres velocidades y eventualmente el control del
caudal de agua suministrado, adecuando de esa manera su capacidad a las cargas
parciales.
En la mayoría de las aplicaciones residenciales no todas las
habitaciones son utilizadas al mismo tiempo o con la misma intensidad de carga.
Con la instalación de fan-coil en cada ambiente, se puede lograr el control
individual de temperatura lo que permite obtener una instalación altamente
eficiente, al enfriarse los locales que realmente se utilizan, puesto que
cuando no se requiere refrigeración, deteniendo el ventilador, se reduce la
transferencia de calor del aire al mínimo.
La gran ventaja de los sistemas de climatización con
fancoils está en su gran flexibilidad de funcionamiento, porque es posible
parar las unidades de acuerdo con las necesidades.
Sin embargo este sistema tiene una serie de inconvenientes
que limitan su uso; prescindiendo de consideraciones de tipo económico tenemos
los siguientes:
La gran ventaja de los sistemas de climatización con
fancoils está en su gran flexibilidad de funcionamiento, porque es posible
parar las unidades de acuerdo con las necesidades.
Sin embargo este sistema tiene una serie de inconvenientes
que limitan su uso; prescindiendo de consideraciones de tipo económico tenemos
los siguientes:Distribución de aire mala, que muchas veces da lugar a problemas
de corrientes molestas.
Necesidad de crear
una red de distribución de aire de renovación (En este caso una UTA pre-trata
el aire primario antes de distribuirlo a los fancoils)
Imposibilidad de
controlar el grado de humedad con el aparato terminal.
Mantenimiento
importante debido al gran número de ventiladores y motores eléctricos en la
instalación.
Nivel sonoro bastante elevado.
Incierto control de
la tª, sobre todo si los termostatos son del tipo todo-nada.
Espacio ocupado en
planta y consideraciones eléctricas.
El sistema de control puede hacerse por medio de un
termostato todo-nada que actúa sobre el motor eléctrico del ventilador. Si se
desea que el mismo dispositivo controle el funcionamiento del equipo en
invierno y en verano, el termostato debe incorporar un dispositivo de inversión
de actuación frío-calor.
Este sistema se emplea con frecuencia en edificios
destinados a oficinas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario